lunes, 22 de diciembre de 2014

PEQUEÑAS ACCIONES QUE PUEDEN CAMBIAR EL MUNDO



Ya sé que no soy nada original, ya sé que esperaríais de esta sandía un poco más de mala leche y poco menos de lágrima fácil, pero que le voy a hacer soy así. Un sentimental.

Cuando esta mañana he visto este video, que seguro que es de alguna multinacional apestosa, me he preguntado si más que el símbolo de unas “navidades” en paz y armonía no sería la evidencia de un Mundo en decadencia. Echarle un vistazo.


Que nos emocione (espero que a vosotros/as también) un video donde lo único que se ve hacer a la gente son gestos sencillos, de esas cosas que deberíamos hacer sin darnos cuenta, demuestra que este mundo nuestro esta malherido.

Pero a la vez nos recuerda eso que los sandieros decimos y yo leí por primera vez en un libro de Petra Kelly (Luchar por la esperanza, creo) “pensar global, actuar local”. Cuantas veces lo he dicho y cuantas veces tengo que reconocer que es la síntesis perfecta de un pensamiento profundo y complejo. Solo cambiando lo que somos cada día, lo que hacemos cada día, podremos pensar que el mundo cambiará alguna vez. 

El Mundo está enfermo, nosotros/as estamos enfermos, pero la cura no vendrá de fuera, la cura está en nosotros mismos, y tú, lo sabes.

martes, 9 de diciembre de 2014

A Ladis. Uno de los imprescindibles

He conocido hoy el fallecimiento de Ladislao Martínez (Ladis) una de esas personas que sabes que siempre estarán contra la injusticia, sea esta la que sea. Hoy le he mandado esta carta a sus compañeros de Ecologistas en Acción y me gustaría compartirla con todos vosotros. Gracias Ladis.

No tengo palabras, pero las buscaré, para expresaros lo que siento a nivel personal y lo que sentimos los socialistas que nos sentimos también ecologistas, con la pérdida de Ladis.


Yo le conocí cuando ya era un reconocido lider ecologista y yo un recién llegado a la Dirección de Amigos de la Tierra, y le conocí discutiendo sobre la energía eólica, él defendiéndola y yo poníendola en duda. Debatimos con ardor, pero con respeto y en todo momento Ladis me trató, no como un novato recien llegado (cosa que si hicieron otros) sino como alguien a quien debía convencer (lo hizo a medias como le reconocí más tarde) y sumar a la defensa de las renovables.


Luego coincidimos en muchos sitios y la última vez manifestándonos contra la privatización del Canal o contra Eurovegas, que no me acuerdo, en casi todos los sitios le podía ver, siempre con el mismo respeto y afecto.


Ayer volviendo de viaje escuche una vieja canción de Silvio Rodríguez en cuya introducción recita unos versos de Bertolt Brecht que ahora sé que iban dedicados a él.


Hay hombres que luchan un día y son buenos.
Hay hombres que luchan un año y son mejores.
Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos.
Pero hay quienes luchan toda la vida. Esos son los imprescindibles.


Y Ladis era uno de estos. Ojala podamos seguir sus pasos.

jueves, 4 de diciembre de 2014

NO HAY CHORIZOS



No, no hablo de corrupción, que va. Hablo de Cambio Climático. 

Y me diréis. ¿Qué tiene que ver el chorizo con el Cambio Climático?. Pues mucho.  Lo explico. 

Me dice mi amiga Piedad, que este año no hay matanza en Badajoz. Que no hace frío suficiente y que además hay moscas a montones (claro, no hace frío) por lo cual la matanza hay que retrasarla o suspenderla, aunque esto último no creo, menuda es Piedad con su matanza.


A la vez que recojo la queja de mi amiga por whasspp, oigo en la radio a Javier Gregori  (Cadena SER) y luego lo leo en El Mundo http://www.elmundo.es/ciencia/2014/12/03/547f422de2704e3a0c8b456d.html que si noviembre y diciembre no cambian y no tienen pinta de cambiar, 2014 será el año más caliente (de temperatura se entiende) desde que se tienen registros en el planeta y lo dice la Organización Mundial de Meteorología, no este sandia o alguno de sus adláteres.


Ya íbamos por la calle algo descamisados este noviembre, incluso en algún momento pareció que volvía aquello del Veroño que tuvimos en octubre. Pero es que como casi ni nos acordamos, en enero tampoco hizo mucho frío que digamos.


Van sucediéndose los informes y los años y las conferencias de las partes del Convenio de Kioto y cada vez tenemos más claro que el calentamiento existe, que el Cambio Climático es un hecho (preguntar a las 200.000 personas afectadas por la inundaciones en Paraguay o a mi amiga Piedad que no sabe cuándo podrá hacer su matanza, sus chorizos, salchichones y ese lomo que me trae por el camino de la amargura).


Van sucediéndose, decía, los hechos y no hacemos nada. Seguimos pensando que si los acuerdos voluntarios de empresas, que si el acuerdo EEUU-China para 2030, que si pitos, que si flautas, y la única verdad es que cuando queramos hacer algo ya va a ser demasiado tarde.


Llevo años diciendo que en nuestro país el negocio más afectado será el turismo, porque para que van a venir los sonrosados ingleses a nuestras costas si en las suyas hará mucha mejor temperatura (los 45o que pronostican para nuestro mediterráneo no creo que atraigan mucho a quienes tendrán 30o en las costas de Cornualles, Devon o Brigthon).


Pero ahora se unirá el de los embutidos auténticos. Esos que se secan al aire “serrano” y no en factorías con termostatos y maduradores químicos.


Estamos empeñados en salir de una crisis y no nos damos cuenta que de la gorda (la ecológica), no solo no salimos, sino que lo que hacemos para salir de la otra agrava esta. ¿Hasta cuándo seremos tan estúpidos de no darnos cuenta de que el dinero no se come?