Esta mañana he visitado las entrañas de nuestras
instituciones, he asistido a la más llana y directa aplicación de la democracia,
eso sí, tal y como la entiende el Ayuntamiento Botellín y el Partido Popular
que hace 25 años que ordena y manda en nuestra ciudad.
Os pongo en antecedentes.
Hoy en la Junta Municipal de Villaverde se debatía a
propuesta del PSM para que se garantice que los 147 árboles que han cortado
porque les molestaba en la urbanización del antiguo cuartel de Ingenieros de la
Ciudad de los Ángeles, tengan la respuesta “legal” y social a la que están
obligados los responsables municipales(gracias a las compañeras/os que lo han
presentado y defendido y al resto de grupos de la oposición que lo han apoyado,
al PP no le doy las gracias, porque su apoyo ni es sincero ni es de fiar, lo
siento, pero lo digo como lo siento y como lo he visto).
Lo primero que me ha llamado la atención y como, es que me
han recibido a las 9’45h (empezaba a las 10h el Pleno) dos mozalbetes con
cuerpo, cara, botas, pantalones, gorra y porra de “antidisturbios”. Ostras, ¿por
unos árboles y unas firmas?.
No. Por unos vecinos que llevan 20 años esperando que el
IVIMA cumpla lo que un juez les obligó en una sentencia, rehabilitar sus pisos en la Colonia Experimental
de Villaverde Alto, y es que se sabe que un vecino indignado es peligroso, pero
20 años de indignación solo lo para mozalbetes antidisturbios de gorra,
grilletes y porras en ristre.
Luego, lo siguiente que le sorprende a uno es la mecánica.
Lee la Secretaria la proposición del grupo de oposición (que
digo yo que si ya la han pasado por escrito, para que se lee. Ah si, para que
se enteren los ciudadanos custodiados por los mozalbetes antes mencionados,
pero vaya, unos folios con el orden del día y acabamos antes, digo) a lo que íbamos.
El grupo de oposición explica el motivo de porque pide que se arregle un bache
o se ponga un columpio o se respete la Ley del arbolado, luego interviene el PP
para decir, si (al menos mientras he estado yo ha dicho si a las ocho propuestas
presentadas) PERO…. y la señora portavoz del Partido Popular leía un texto más
o menos largo que a todas luces había sido elaborado por lo servicios técnicos
municipales a los que les tocara el entuerto.
Luego intervenían el resto de grupos de menor a mayor (votos
en las últimas elecciones). Decían lo que les venía en gana, apoyando la
iniciativa y poniendo a bajar de un burro por inoperantes, faltos de
competencias, incapaces y políticamente desastrosos al Ayuntamiento y al grupo
Popular.
El grupo proponente daba las gracias (en siete ocasiones
UPyD) y curiosamente, se enzarzaba con cualquiera de los grupos de oposición.
¡¡¡¡ Si, de oposición¡¡¡. Y aquí yo ya
no entendía nada. Al PP educación, cortesía y crítica, como no, crítica y
constructiva, pero a los otros grupos de oposición, unas ostias como panes.
Y el PP vuelve a intervenir (no entiendo porque tienen dos
turnos y no uno como el resto de mortales) para sacudirles otra somanta de
tortas a la oposición. Cierra el Concejal, soltando alguna que a su Portavoza
se le había pasado y a otra cosa mariposa.
Hasta aquí se puede pensar que qué rollo (que lo era) que
qué aburrimiento (y que cierto) y que si no se podía ser un poco menos
encorsetado (sería de agradecer).
Pero mirar lo que ha pasado en el tercer o cuarto punto.
Pide la oposición (UPyD en concreto) que se utilice a los músicos del distrito
para tocar en el distrito (músicos clásicos en este caso) porque Villaverde
tenemos el mismo derecho de escuchar a Beethoven que en Moncloa. Todo los
grupos apoyan (incluido el PP, en su primer turno) y cuando llega la Señora
Portavoz Popular a su segundo turno empieza, ante la sorpresa general, a
enumerar con día, mes y año, todas las actuaciones de música clásica realizadas
en todos y cada uno de los 6 Centros Culturales, desde el año 2010 hasta
nuestros días.
Sesenta indignados vecinos (cada uno por su cuenta) han
estado en silencio hasta la decima o undécima alusión (una de ellas era “Concierto
de Pavarotti el 3 de marzo de 2012”. Díos, en Villaverde resucitaron a
Pavarotti para que tocara en un Centro Cultural. Milagro grite para mi
interior) la gente no ha aguantado más y se ha montado una trifulca donde les
pedían al PP que fueran a lo importante y que se dejaran de gilipolleces
(textual) y desde la Presidencia se instaba al silencio y al “respeto” , total 30
minutos de lectura trufada de insultos, cortes de mangas físicos y hablados,
porque el PP quería calentar el ambiente y alargar hasta que se cansasen y se
fueran esos vecinos, o eso parecía.
Luego más llamadas al respeto y a dejar hablar y yo mientras
me preguntaba. ¿Es respeto estar 20 o 25 minutos leyendo una retahíla de datos
que a nadie le importan y que en todo caso podían haberse repartido por
escrito? No, no es respeto.
¿Es respeto que el Partido Popular se sume a cualquier
proposición porque instan a otros departamentos del Ayuntamiento y no reconozca
que ni tan siquiera para arreglar una acera la Junta Municipal tiene competencia?.
Y encima luego, ni la arreglan, que ya tiene bemoles.
¿Es respeto que los vecinos, 20 años indignados, tengan que
aguantar como se ríen en sus narices, no solo de ellos, sino de quienes les
representan en los grupos de oposición y por lo tanto de todos nosotros?.
Siempre lo he pensado y hoy me reafirmo. En esta ciudad, en
esta país hay que cambiar muchas cosas, muchas políticas, muchas actuacioes, pero sobre todo, hay
que cambiar las formas, unas formas muy poco democráticas, acuñadas en 25 años
de mayorías absolutas populares que han pervertido lo mejor de la democracia y
de los Ayuntamientos, la cercanía, la participación, la posibilidad de dar la
palabra a la ciudadanía, escuchar, atender y solucionar sus problemas.
Pero no. Han convertido las instituciones en pequeños y
patizambos parlamentos donde lo que importa es el descrédito de la institución
y de la democracia. Hasta ahora les ha salido bien. Esperemos que a partir de
mayo de 2015, tengamos la fuerza para cambiarlo.
